Fernando Sanz
@fernandosanz.alba
El veterano peso pesado británico Derek Chisora (36-13, 23 KO) podría celebrar su pelea número 50 como profesional con un duelo que los aficionados llevan años esperando: una trilogía frente a Dillian Whyte (31-4, 21 KO). Según reportes de medios estadounidenses, el combate está “al 100% encaminado” para el 13 de diciembre en el Co-Op Live Arena de Mánchester, con la organización de Queensberry Promotions. Aunque aún faltan detalles contractuales por cerrar, ambos boxeadores han mostrado disposición para enfrentarse por tercera vez. Chisora, de 40 años, dejó claro que su participación dependerá de las condiciones del acuerdo. “Si el contrato es el correcto, lo haremos. Por ahora, no lo es”, aseguró durante una aparición pública, dejando entrever que las negociaciones están muy avanzadas.
Whyte quiere una pelea “explosiva”
Dillian Whyte, que no duró ni dos minutos en su última actuación ante Moses Itauma (13-0, 11 KO) respondió con su habitual franqueza, afirmando que no teme a ningún oponente y que está preparado para cualquier desafío. “Yo no huyo de ninguna pelea, no me importa, pelearé con quien sea”, dijo el ex campeón interino del WBC, insistiendo en que su motivación sigue intacta.
Por su parte, Chisora encadena a sus 41 años tres victorias consecutivas y ante rivales potentes como Otto Wallin (27-3, 15 KO) y Joe Joyce (16-4, 15 KO). El veterano peso pesado buscaba un rival de renombre para su combate número 50 profesional.
El promotor Frank Warren también se mostró optimista sobre la posibilidad del combate. Aseguró que la trilogía es “una pelea increíble y explosiva entre dos guerreros con historia”. Whyte y Chisora se enfrentaron por primera vez en 2016, en un duelo muy reñido que terminó con victoria por decisión dividida para Whyte. En la revancha, disputada en diciembre de 2018, Whyte se impuso por un nocaut espectacular en el undécimo asalto, cuando Chisora iba por delante en dos tarjetas.
La última gran noche de dos veteranos
El combate significaría el cierre de una de las rivalidades más intensas del boxeo británico reciente. Ambos llegan a esta cita en la recta final de sus carreras, buscando una última gran noche en el cuadrilátero. Si todo se confirma, el evento pondrá fin a una década de cruces entre dos pesos pesados que marcaron una era en el boxeo del Reino Unido.
