El veterano promotor Bob Arum lleva años detrás de cerrar un enfrentamiento entre una de sus grandes estrellas en la actualidad, Terence Crawford, y el que fuese su boxeador más mediático, Manny Pacquiao. Las pretensiones económicas de ambos, y que el filipino trabaje con su rival Al Haymon, han impedido que haya negociaciones avanzadas.

Tras el parón forzado por el coronavirus, Arum quiere que Crawford se enfrente a un rival de primer nivel el 14 o el 21 de noviembre. Sobre la mesa de Top Rank vuelve a estar el nombre de Pacquiao, pero parece difícil que el filipino pueda pelear en esa fecha, dado que su agenda política en su país se lo impediría.