Darío Pérez

Juan Félix Gómez (San Lorenzo del Escorial, 1996) es uno de los nombres que reclama su sitio en nuestro boxeo para la década que comienza. Con ocho victorias en ocho combates, una antes del límite, “Juanfe” es coaspirante oficial al Campeonato de España superpluma. Aunque madrileño de nacimiento, reside en Elche y ha charlado con ESPABOX sobre su preparación para el título nacional y otros temas.

-Hola, gracias por atendernos. Dinos quién es Juanfe Gómez, para los aficionados que aún no te conocen.
-Soy un chico sencillo, como cualquiera de mi edad, con la particularidad de que boxeo. Nací en la zona de Madrid, pero me trasladé hace tiempo a Elche por motivos personales.

-¿Cómo empiezas en el boxeo amateur, siendo aún muy joven? En España hay muchos deportes más populares.
-Pues tenía 15 años recién cumplidos y empecé poco a poco a entrenar. Yo no tenía ni idea de boxeo, y fue por influencia de mi hermano mayor, Eusebio Arias, que me enseñó mis primeros pasos y me dijo de probar a aprender un poco. Cuando yo comenzaba en el gimnasio, impartía las clases Kiko Martínez, y te voy a contar una anécdota para que veas lo poco que sabía yo de este mundo (ríe). Yo no sabía quién era ese hombre, que era en ese momento Campeón de Europa; yo vi los carteles de sus veladas por el gimnasio y me impresionó que una persona así me estuviera dando clases, así que eso me hizo tomármelo como algo que era muy importante, me motivó muchísimo.

Aparte de eso, en las clases Kiko me dijo que veía algo en mí, porque yo era muy constante, me encantaba ir y nunca faltaba. Me habló de empezar a pelear cuando llevaba seis meses entrenando, y le dije que sí. Gané, tuve una motivación mejorando poco a poco y me di cuenta de que yo quería seguir y adentrarme en ello, sin haber cumplido los 16.

-Hace unas semanas, en ESPABOX entrevistamos a tu entrenador, Vicente Fernández. Nos contó un poco tu paso a profesionales, con un combate a domicilio muy duro, ante un rival experimentado como Dani Gómez. Ese momento tiene que ser especial. ¿Cómo se afronta?
-Yo seguí avanzando en el boxeo, fui Campeón de España en 2016 y estaba preparándome para una pelea amateur cuando me comentó Vicente el posible paso a profesionales. No me lo creía, me quedaba muy grande la palabra “profesional”, eso en cualquier deporte es algo que significa mucho. Poco a poco, pasaron los días y me hice a la idea, pero en el momento fue complicado de asimilar tan de repente.

-Tras vencer en ese debut, te ficha Koke para KO Boxing. ¿Podrías explicar a la afición qué implica eso para un boxeador que empieza, y también cómo os coordináis entre tu equipo de entrenamiento habitual, tu promotora, etc?
-La verdad es que yo quería a una promotora detrás, un buen apoyo para buscarme peleas, y por suerte llegó Koke, estuve encantado y agradecido de poder trabajar con ellos. Además, al acabar ese debut me vino a saludar Miguel de Pablos, que me dio la enhorabuena… Fue increíble, vino a darme la mano una persona tan importante en el boxeo y yo me empecé a dar cuenta de que no lo estaría haciendo tan mal (ríe, animado).
Sobre el trabajo en equipo, no es muy complicado. Si sale alguna proposición, Koke se lo comenta a Vicente, y él a mí; para aceptar una pelea o cualquier otra cosa, tenemos que estar de acuerdo los tres. Las decisiones son consensuadas por los tres, pero nunca tenemos problemas y es un trabajo muy bien coordinado.

Con Eusebio Arias (hermano y compañero), Koke (promotor) y Vicente (entrenador)

-¿Qué nos cuentas de Vicente como entrenador?
-Es muy trabajador, tiene todo estudiado y mecanizado. Le dedica muchísimo tiempo y mira todos los factores para el entrenamiento y la pelea, casi lo estudia demasiado, pero eso al deportista le viene súper bien. Es un entrenador duro y exigente, porque es la única manera de que yo avance y progrese como boxeador.

-En tu aún corta carrera, el año pasado se aprecia una evolución, y es que tus dos últimos rivales presentaban un récord muy positivo. Tras vencerles, eres nombrado aspirante al Campeonato de España superpluma de John Carter. El granadino lo abandona buscando metas mayores, y nombran a José Ramos Savín coaspirante. ¿Qué cambia eso de cara a la pelea y qué sabes de tu nuevo rival? Savín es un chico menos conocido que Carter, pero te saca unos años y viene de noquear a domicilio a un gran prospecto británico.
-Hay algo en medio, cuando Carter abandonó el título y yo era aspirante oficial, nombraron para pelear conmigo a Ibon Larrinaga, de MGZ. Cuando la pelea salió a subasta, ellos declinaron la posición de aspirante oficial al título y no llegaron a pujar; fue una pena, yo habría ido al País Vasco a pelear por el título si hubieran ganado ellos.
Acerca de Ramos Savín, nombrado después por el Comité de Boxeo Profesional, sé un poco eso, que le ganó a un invicto en Inglaterra y ya ese hecho dice mucho de una persona. Es guerrero y sale a por la victoria, es un chico con ganas contra otro chico con ganas, así que va a ser una pelea increíble para la afición. Seguro que sabía que por puntos iba a ser imposible ganar allí, salió a por todas y ahí está el resultado.

-El combate lo organizará KO Boxing tras ganar la subasta, y pelearás “en casa”. Había la previsión de celebrarlo en Guardamar del Segura a principios de abril, pero la pandemia lo paró todo. ¿Se sabe algo de la pelea?
-Estamos mirando, sí, intentando ver cómo evoluciona el fin del confinamiento. Somos cautos, porque te viene un rebrote en medio de la preparación, y se te va todo a la basura de repente. Sabes que tienes que ponerte en marcha y habrá una fecha nueva, pero es muy difícil hacer el campamento sabiendo que puede terminarse en cualquier momento. En cualquier caso, estamos intentando mirar hacia delante y ver cuándo se reubica la pelea.

-Finalmente, unas preguntas muy rápidas sobre tu boxeo. ¿Por qué el apodo “El Mago”?
-Eso fue por Vicente. Yo me lo tomaba a coña, pero le dijo a Koke: “Ponle El Mago”, y ahí se quedó. Dijo que cuando boxeas conmigo te entran manos que no sabes por dónde vienen, y es como por arte de magia, yo no te puedo decir nada más (entrecortado por risa nerviosa).

-En ocho victorias, solo has noqueado una vez. ¿Eso te preocupa de cara a peleas más importantes contra rivales de gran nivel?
-Yo no busco el KO realmente, y quizá tampoco lo encuentro porque pego siempre moviéndome. Vicente me ha intentado hacer ver la diferencia con pegar “sentado” haciendo manoplas, porque al moverme te pego, pero pierdo potencia. Como ves, lo estamos trabajando con la idea de ir endureciendo un poco la fuerza de mi pegada.
-Por último, ¿Cómo ves el futuro del boxeo español? Ya antes del confinamiento, era complicado al no haber tanto apoyo televisivo o asistencia a veladas como en otros países. ¿Ahora qué percepción tienes del futuro de nuestro deporte?
-Ojalá supiera lo que viene en el futuro. Dicen que el boxeo se está moviendo un poco más en España últimamente, pero cuesta mucho. Hay muchos grandes profesionales, entre los que yo no me incluyo, que necesitan un trabajo complementario, porque el trabajo no les da de comer. Obviamente, es mi caso, tengo otro trabajo aparte del boxeo y hay que intentar hacer que todo sea compatible y me levanto a las 5 de la mañana para poder hacer todo.

-Muchas gracias, Juanfe. Ojalá algún día puedas cumplir el sueño y vivas solo de nuestro deporte. Suerte en lo venidero.
-Trabajo para que ese día llegue. Muchas gracias también a vosotros.