Julius Julianis
@JulianisJulius

El local Víctor Emilio Ramírez (22-2-1, 17 KO) retuvo el cinturón mundial crucero IBF el viernes pasado con un polémico empate frente al inglés Ovill McKenzie (25-12-1, 13 KO) en combate celebrado en Villa La Ñata, Argentina.
El inglés, retador, situado en el puesto nº 14 del ranking crucero IBF, fue avisado sólo 11 días antes de la contienda, puesto que en un principio quien se iba a enfrentar a Ramírez era el cubano Yoan Pablo Hernández (29-1, 14 KO), pero la enésima lesión de este último obligó a buscar un sustituto de última hora. Casi nadie daba posibilidades de victoria a Ovill, pero se presentó en muy buena forma física y le hizo la vida imposible a Ramírez en la mayor parte de los asaltos, no permitiendo al campeón encontrar el ritmo de combate que buscaba.

Tras los 12 rounds, un juez dio ganador a Ramírez, otro a McKenzie (cada uno con 115-113 a su favor) y el tercer juez certificó el empate con una tarjeta de 114-114, lo que permite al Tyson Ramírez conservar el cinturón (el retador tiene que ganar para llevarse el cinto, el campeón lo retiene ganando o empatando).
La indignación de Ovill y su promotor, Frank Warren, es grande, pues consideran que ganaron el combate con bastante claridad y por tanto han solicitado formalmente a IBF que ordene una revancha inmediata y obligatoria, revancha que intentarán llevar al Reino Unido.