Pablo Alonso
@PabloAlonsoPig

A una semana de la disputa del Campeonato de España del peso semiPesado, Carlos Esteban, 10-1-0 (2 KO), atendió a ESPABOX en el gimnasio Box Everlast de Villaviciosa de Odón, para hablar sobre esta importante cita que le espera.

Pablo Alonso – Con, prácticamente, todo el trabajo hecho, ¿Cómo te encuentras a 7 días de la pelea?
Carlos Esteban – Muy relajado, bastante satisfecho con el trabajo que hemos hecho y muy fuerte. Estoy muy bien la verdad.

– ¿Cómo ha sido la preparación física?,¿cómo eran los entrenamientos?
– Se va alternando, al principio empiezas trabajando ejercicios más de resistencia y fuerza. Según se va acercando la pelea prima más la velocidad, se va bajando y se mete más potencia y velocidad, para que cuando lleguen los últimos días estés fuerte y tengas rapidez de manos y de piernas.

– ¿Te ha ayudado algún preparador físico?
– No, el trabajo me lo manda Luis Muñoz.

– Háblame del trabajo específico de guantes, ¿Cómo habéis hecho?
– He ido alternando. El día que entrenaba más caña en la carrera, por la tarde entrenaba manoplas o sacos y el día que era más relajado por la mañana, por la tarde guanteo.

– ¿Cuántos días hacéis sparring?
– Yo para esta pelea he ido haciendo, durante bastante tiempo, un día a la semana. Según se acercaba la pelea, hemos hecho 2 días y ya está. Tampoco hemos terminado metiendo mucha tralla de guanteo.

– ¿Quién te ha ayudado en el sparring?
– He guanteado con Mariano Hilario, que iba a hacer el Campeonato de Europa, y he guanteado con mis compañeros de gimnasio, Adrián Torres, Sergio Compadre, Manuel, César Villalba. Han ido alternándose de una manera distinta y me han ayudado a coger ritmo.

– Eres un púgil muy alto, ¿Cómo llevas el peso?
– La verdad es que lo llevo bien porque yo siempre he sido delgado. Yo entrenando estoy en 84 o 85 kg, por ahí. Sin entrenar sí que subo, pero subo a 87 u 88 kg, no subo más. Siempre he sido de complexión delgada.

– ¿Te ha ayudado algún nutricionista?
– Si, consulto mucho a Quique de Nutrisport. Le consulto todo el tema de la alimentación. Tampoco es que hagamos nada especial, simplemente, comer bien, sano y adecuándolo a los entrenamientos.

– Centrándonos en la pelea, hemos leído esta semana en ESPABOX palabras de Adasat sobre su estrategia, en las que decía que iba a proponer una pelea con un ritmo muy alto, muy encima de ti y sin dejarte respirar. ¿Es lo que esperas encontrarte?

– Si, supongo que hará eso. Yo propondré lo contrario, voy a pelear a larga distancia intentando llevar el tiempo y el ritmo de la pelea.

– Yo sé que uno de tus puntos fuertes es la estrategia, estoy seguro que tienes una clara, pero ¿hay plan B por si fallara?
– Para esta pelea hemos trabajado muchas cosas, hay plan A, B y C. No queremos dejar nada al vuelo, que siempre tengamos una respuesta para lo que pueda hacer él.

– Tienes muchas similitudes físicas con Erik Skoglund, ¿podríamos tener una pista por ahí?
– Si, pero yo no creo que me parezca a él, quizás por la altura, pero no creo que me parezca a Erik Skoglund. Físicamente, si, pero en el boxeo, no. Pero claro, un boxeador alto, cuando se enfrenta a un boxeador tipo Adasat, que va hacia delante, pasando manos y te va cortando el terreno, es lo que tiene que hacer. Tampoco hay más secretos. O peleo en mi distancia o, si me meto en la suya, tengo las de perder.

– Eres un púgil técnico, que te sientes más cómodo a medida que pasan los asaltos, ¿te beneficia que la pelea sea larga?
-Bueno, es la primera vez que hago una pelea a 10 asaltos, entonces no sé cómo estaré. Pero si que en los guanteos siempre me encuentro mejor a partir del 4º o 5º asalto. No tengo bajón, así que espero que en la pelea sea igual, que me vaya encontrando mejor según pasen los asaltos.

– ¿Tienes menos presión peleando fuera de casa?
– Al final, la presión es la que uno se ponga. Por una parte voy a estar relajado por que no estás en tu barrio que la gente te ve, te pregunta, te llama. Pero vamos, la presión es la que uno se pone.

– ¿Eres de los que estudias mucho al rival viendo videos?
– No me obsesiono, pero sí que los veo pelear. Intento siempre ver vídeos de todos los boxeadores. A Adasat, antes de que fuera a pelear con él, ya le había visto boxear en vídeo 3 o 4 peleas y, en directo, yo creo que le he visto pelear dos veces, entonces ya le conoces. Si que es cierto que la pelea es con él, entonces lo ves en más videos, pero tampoco me obsesiono. Igual pasan 3 o 4 días y no le ves y luego, otro día, ves 3 peleas suyas.

– ¿Es la pelea más importante de tu carrera?
– Hasta ahora, si. Sí, sin duda. Soy consciente de lo difícil que es hacer un título. Hay gente que no lo hace o que tarda un montón en hacerlo o yo que se. Soy consciente de que es mi pelea más importante.

– Adasat es aspirante al título de la Unión Europea, si ganas ¿podrían nombrarte aspirante?
– No quiero saber nada. Sólo pienso en la pelea con Adasat y, después, ya veremos. Sólo estoy centrado en esta pelea.

– Después de la derrota con Doudou Ngumbu, estuviste 3 años sin pelear, ¿Qué pasó?
– Venía arrastrando dolores en el codo izquierdo y, de tanto seguir entrenando y no parar, se prolongó la lesión. Una lesión que ha costado curarse. Cuando estaba para volver, me excedí entrenando fuerte y tuve una recaída. Luego, cuando me recuperé, un miembro de mi familia tuvo problemas de salud y la cabeza tampoco estaba para volver a pelear.

– Dos peleas en 2014, ¿Cómo fue la vuelta al ring?
– La pelea con Raúl Martínez (Q.E.P.D) si que fue un poco como decir: “estoy otra vez aquí”. Fue muy intenso todo, porque veía que volvía, que había pasado mucho tiempo y sí que tenía esa tensión primeriza, mira que ya había hecho más peleas antes. Luego, en la pelea con Fatah Baghban sí que estaba más relajado, ya habíamos entrenado más. Con el entrenamiento continuo, me veo con el ritmo para competir que era lo que más me faltaba. Porque yo, aunque no estuviera en el gimnasio, seguía entrenando, iba a correr, pero no tenía ritmo de competición ninguno.

– ¿Cómo es un día en la vida de Carlos Esteban cuando prepara una pelea?
– Me suelo levantar a las 7. Saco a la perra y me voy a correr. Vuelvo a casa, me pego una ducha, desayuno y me voy a trabajar que doy clases de boxeo en el gimnasio Box Everlast de Villaviciosa. Salgo a mediodía, como y todo en el gimnasio que tenemos sitio, descanso un rato y me voy al Club Coraje en Fuenlabrada. Entreno 2 horas, de 16 a 18. Termino de entrenar y me voy a Pinto a dar clases en “El arte del combate”. De ahí ya salgo sobre las 21 o 21:30 y ya me voy para casa a descansar. Estoy todo el día en un gimnasio, o entrenando o dando clases.

– Te has sacado el título de entrenador y junto a tu hermano Pedro estáis empezando a sacar boxeadores amateurs, ¿Cómo te sientes en esta faceta?
– Pues nada, poco a poco aprendiendo, intentando ser una persona seria y correcta para que a la gente le vaya bien. Intento no engañarles, les digo que esto es duro y que el que quiera pelear tiene que dar el callo, hay que machacarse. No pueden estar saliendo los fines de semana si dentro de dos semanas van a pelear, que tienen que estar muy centrados. Más que nada, intentamos que la gente vea esto con respeto. Enseñar lo que buenamente sabemos e intentar transmitirlo. Pero sobre todo que la gente coja respeto, lo aprenda, aprenda lo que es este deporte y lo vea con otros ojos.

– Ya para terminar, ¿Qué boxeadores jóvenes españoles ves que tengan un buen futuro?
– Pues me gustan mucho Eric Pambani y Jerobe Santana, me parece que lo hacen los dos muy bien. Así jóvenes, estos son los chavales que más veo. Luego, también, mi compañero de gimnasio, que está en amateur pero lo hace muy bien y es muy joven, Adrián Torres, que, yo creo, que cuando pase a profesional dará que hablar.

– Muchas gracias, Carlos, por tu tiempo y mucha suerte para la pelea.
– Gracias a vosotros.