Manuel Valero
@Manu_Valero

Como es tradición en el país del Sol naciente, el 31 de diciembre será un gran día para el boxeo japonés. El cubano Guillermo Rigondeaux (14-0, 9 KO) viajará hasta Osaka para exponer su corona mundial supergallo WBO ante el local Hisashi Amagasa (28-4-2, 19 KO).
Desde que venciese a Nonito Donaire en abril de 2013, Rigondeaux ha vivido un auténtico calvario causado por Top Rank y HBO, achacado a su falta de tirón en el público americano que no gusta de su refinado estilo, prefiriendo los intercambios desordenados de boxeadores como Brandon Ríos o Mike Alvarado.

Rigondeaux finalizó su contrato con Top Rank venciendo a Sod Kokietgym en julio en el primer asalto y ha recibido varias ofertas de promotoras como la encabezada por el rapero Jay Z. Sin haberse decantado todavía por ninguna, “El Chacal” ya se encuentra en Japón después de entrenar en Miami con Pedro Rubio para enfrentarse a Amagasa, en la que será la primera oportunidad mundialista para el nipón.
El cubano espera lucirse ante el japonés para poder pelear al fin con los grandes nombres de la división, como Leo Santa Cruz o Carl Frampton.

La empresa Caribe Promotions, que trabaja con Rigondeaux, declaró su intención después del acercamiento de Estados Unidos a Cuba de que el boxeador pelease en La Habana ante 100.000 espectadores en lo que supondría su vuelta a la isla tras su fuga en 2009.