José Manuel Moreno
@josemorenoco

El boxeador alemán de origen serbio Marco Huck (39-2-1, 26 KO) retuvo su corona del peso crucero de la WBO tras imponerse por decisión unánime al italiano Mirko Larghetti (21-1, 13 KO). Este último, excampeón de Europa, pierde su condición de invicto, de esta manera, en la primera oportunidad de título mundial de su carrera profesional, que comenzó en 2009, cuando ya contaba con 27 años. La pelea se celebró en el Gerry Weber Stadiumm de Halle (Alemania), absolutamente abarrotado. Huckl ha dominado la división del peso crucero desde agosto de 2009. Dos jueces dieron ganador 116-112 al germano y el tercero, de nacionalidad mexicana, amplió esa diferencia, quizás de forma exagerada, a 118-110. Huck, de 29 años, ya una década como profesional, solo atesora dos derrotas en su palmarés. La primera llegó en diciembre de 2007 ante el estadounidense Steve Cunningham y la segunda y última, en febrero de 2012, ante Alexander Povetkin, en la única incursión que ha acometido en la división del peso completo.

Los últimos segundos de la pelea fueron devastadores por parte del campeón, que arrojó al aspirante a la lona justo al final, cayendo Larghetti de muy mala manera y con evidentes síntomas de estar absolutamente groggy. En principio, el gesto del árbitro Jack Reiss fue el de decretar el nocaut, porque además, como todo el mundo sabe, nunca puede salvar la campana en un campeonato internacional, pero al final, y tras unos minutos de confusión, se fue a la decisión por puntos. Y estas certificaron el justo triunfo del peleador de origen serbio ante un muy digno contrincante italiano. Marco Huck, con esta clara victoria, iguala al británico Johnny Nelson, con el mayor número de defensas en el peso crucero (13). No hay que descartar que en los próximos días, la WBO revise el video del final del combate y decrete el KO favorable del campeón alemán.